Quien alegue se inmaculado y jamás haber participado en un acto de corrupción (a excepción de ciertos niños) miente.
La corrupción esta enraizada en nuestra sociedad, es parte de nuestro día a día, desde que amanecemos hasta que anochece estamos rodeada de ella.
Si en efecto todos los días en los periódicos, en la radio, en la televisión, en las redes sociales, en las conversaciones de oficinas en la casa, etc. Estamos llenos de noticias, opiniones, escándalos y recetas relacionadas con la corrupción.
La Corrupción fue la invitada de lujo en las mas recientes elecciones. De hecho el candidato ganador supo leer a la ciudadanía y dijo lo que todos esperábamos el sí iba a acabar con la corrupción.
La Corrupción es la fuente de todos los males y combatiéndola es la receta para la Paz, la Prosperidad y el Desarrollo.
La Falacia consiste en que solamente corresponde a los Gobiernos entrantes combatirla.
Ya que esta de moda me cuestioné si existía o no existía la “Mafia del Poder”.
Tardé dos minutos en toparme en las redes con una noticia sobre una empresa privada que acusa a otra de exigirle la nada despreciable cantidad de U.S.$500,000.00 (quinientos mil Dólares 00/100) para arreglar sus “diferencias” y “cooperar” entre ellas.
Hablando con una de las partes se “excuso” diciendo que era una propuesta y que era “el chisme del pueblo”.
El tema aparente es la extorsión de una empresa arraigada en cierto lugar que le pide a otros empresarios nuevos entrantes una cantidad de dinero como “cooperación” para desarrollar su propio desarrollo y “cooperar” con las nuevas autoridades entrantes.
El cambio de gobierno ofrece muchas oportunidades buenas y malas, las buenas consisten en ahora si hacer las cosas bien, las malas consisten en abusar de la transición para arreglar temas antes del cambio de gobierno y eventualmente “volverse a acomodar”.
Me consta personalmente el abuso que ciertas personas escudadas en sus empresas hacen para su propio beneficio o el de su empresa, esto aparenta pan con lo mismo.
Ahora toca a las autoridades (tanto salientes como entrantes) demostrar que “ahora si” operará el estado de derecho y se dejará a la empresa entrante operar de manera normal y legal.
Como pueden observar aquí tenemos un caso de corrupción entre empresas en donde poco o nada tienen que ver las autoridades.
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