Del Mazo mantiene hegemonía del PRI en Estado de México



Del Mazo mantiene hegemonía del PRI en Estado de México Sáshenka Gutiérrez|EFE|Del Mazo

Hijo y nieto de gobernadores del Estado de México y primo lejano del presidente Enrique Peña Nieto, Alfredo del Mazo, gana por la mínima el Gobierno de este relevante estado que lleva 88 años en manos del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI).

"Será un gobierno de inclusión, de unidad y en donde caben todos", aseguró Del Mazo en un evento celebrado con militantes minutos después del cierre de las mesas electorales este domingo y hasta pasada medianoche, y en el que no faltaron mariachis, bailes y comida.

"Soy esposo, padre, un mexiquense orgulloso, servidor público, disfruto correr y andar en bicicleta", indicaba Del Mazo en su página oficial de campaña, lanzada bajo el lema "Fuerte y con todo".

Una imagen cercana pero severa con la que el político pudo conquistar a cerca de 1,95 millones electores, de un censo de 11,3 millones de votantes, aunque solo poco más de la mitad acudió a las urnas.

Del Mazo proviene de una larga estirpe de políticos. Su abuelo fue Alfredo del Mazo Vélez, gobernador mexiquense del 1945 al 1951, y su padre, Alfredo del Mazo González, también dirigió el estado más poblado del país entre 1981 y 1986.

Aunque ha querido marcar distancias con Peña Nieto - dice que mantiene con él un trato meramente profesional- a ambos se les incluye dentro del grupo Atlacomulco, como se le conoce a un conjunto de políticos del PRI que fueron gobernadores en el Estado e incluso algunos postulantes a la Presidencia de México.

Del Mazo se licenció en Administración por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene una especialidad en Administración y Finanzas en la Universidad de Harvard.

Trabajó en la Gerencia de Financiamientos y Análisis de Mercados de Petróleo Mexicanos (Pemex), en Banco Azteca y en el Grupo Financiero Serfin, hoy fusionado con el Santander, pero pronto arrancó su carrera en política.

En el Estado de México fue en 2005 director general de Fomento a la Micro y Pequeña Empresa de la Secretaría de Desarrollo Económico, luego Instituto Mexiquense del Emprendedor, de 2006 a 2008.

Ese fue el año en el que Del Mazo saltó a la palestra pública, cuando el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, lo nombró secretario de Turismo.

Un año después fue elegido alcalde de Huixquilucan, uno de los municipios con mayor desigualdad de la región.

Ocupó el cargo de enero del 2010 hasta finales del 2012, cuando fue nombrado director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), coincidiendo con el arribo de Peña Nieto a la Presidencia.

En 2015 fungió como diputado federal por Huixquilucan, donde estuvo al frente de la coordinación de la fracción parlamentaria del PRI del Estado de México.

Como candidato al Estado de México, Del Mazo se vendió como un candidato a favor de mantener lo que funciona y hacer cambios donde haga falta.

"Sé que muchos están cansados de la política, de la inseguridad y de todo lo que no funciona. (...) Vamos a mejorar lo bueno que tenemos y a cambiar lo que haga falta, como la inseguridad", aseguró en campaña.

El político se ha caracterizado por su temple y unos fuertes valores tradicionales, siendo abiertamente contrario al aborto y al matrimonio homosexual.

Prometió luchar contra la corrupción y lanzó una serie de propuestas dirigidas a conquistar el voto femenino.

En una de las regiones con más feminicidios, Del Mazo pretende crear un "Estado rosa" y asegurar un acceso a un sueldo para las mujeres trabajadores del hogar no remuneradas.

Su otro caballo de batalla es la seguridad, y para proteger a los mexiquenses de los numerosos delitos a los que se exponen cada día ha prometido más cámaras de seguridad en el transporte público, mejor iluminación y la renovación de centros de mando policial.


ETIQUETAS








icon Bajapress

Accede más rápido

toca Icon iOs y elige añadir a la pantalla de inicio