Ante la alarmante situación, el gobernador Quirino Ordaz Coppel solicitó a la Secretaría de Gobernación federal la declaratoria de zona de emergencia y posteriormente zona de desastre para la región norte y centro del estado, con el fin de que se liberen recursos para enfrentar la emergencia.
Hasta el momento son 1.200 personas en el municipio de Ahome que han tenido que salir de sus hogares para refugiarse en albergues.
Por su parte, personal del Ejército Mexicano ha aplicado el plan DN-III-E de auxilio a la población en los municipios de Ahome, El Fuerte, Salvador Alvarado, Mocorito y Culiacán.
En la zona centro, elementos de Protección Civil establecieron cuadrillas de apoyo en numerosos localidades y la comunidad de El Limón de Los Ramos, que han quedado incomunicadas por las lluvias torrenciales e inundaciones.
En Ahome, El Fuerte, Guasave y Salvador Alvarado, municipios del norte, la Secretaría de Educación Pública y Cultura estatal suspendió clases este jueves debido a la situación derivada de las lluvias en esa región.
En apoyo, la Policía Federal de Caminos cerró a la circulación la carretera Internacional-México 15 debido a la creciente de arroyos.
El gobernador Ordaz realiza un recorrido por las zonas inundadas.
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